Calor mortal en la peregrinación a La Meca: al menos 19 personas muertas por insolación
Casi dos millones de fieles comenzaron los rituales de la peregrinación el pasado viernes en Arabia Saudita, con temperaturas de 45 a 48 °C y altas tasas de humedad. Hay personas desaparecidas, también.
Al menos 14 peregrinos jordanos y 5 iraníes murieron en Arabia Saudita durante la gran peregrinación anual a La Meca (conocida como hach) que se celebra bajo un calor opresivo, anunciaron el domingo las autoridades de sus países.
En un comunicado, el director de Operaciones y Asuntos Consulares, el embajador Sufyan al Qudah, dijo que el Ministerio está siguiendo con las autoridades sauditas competentes los procedimientos para enterrar a los peregrinos y trasladar los cuerpos de aquellos cuyos familiares desean que sean trasladados a Jordania lo antes posible.
Asimismo, afirmó que sigue activa la búsqueda de los 17 peregrinos desaparecidos e indicó que éstos, así como los fallecidos, no formaban parte de los ciudadanos jordanos registrados en la delegación oficial de Jordania que asistía este año al hach.
Los 14 jordanos murieron “después de sufrir un golpe de calor”, agregó el Ministerio de Asuntos Exteriores de Jordania.
Las autoridades sauditas no han comunicado el número de casos de hipertermia observados entre los peregrinos, pero el año pasado se registraron más de 10.000 casos, de los cuales un 10 % fueron golpes de calor.
Dos millones de fieles en la peregrinación a La Meca, bajo un calor extremo
El hach es una obligación religiosa de los musulmanes que consiste en el viaje a la ciudad de La Meca (Arabia Saudita) durante el último mes del calendario islámico para realizar una serie de rituales, entre ellos las siete circunvalaciones a la Kaaba.
La peregrinación a La Meca es uno de los cinco pilares de la religión islámica que deben realizar todos los adultos que sean física y económicamente capaces de emprender el viaje y de mantener a su familia durante su ausencia del hogar.
Los casi dos millones de fieles comenzaron los rituales de la peregrinación el pasado viernes en la región de Mina, un valle de unos 17 kilómetros cuadrados rodeados de montañas donde las autoridades saudíes instalaron miles de tiendas de campaña ignífugas y acondicionadas para su alojamiento. "Gracias a Dios (el proceso) fue alegre y bueno", dijo a AP Abdel-Moaty Abu Ghoneima, un peregrino egipcio. "Nadie quiere más que esto". Muchos peregrinos pasarán hasta tres días en Mina, cada uno arrojando siete piedras a tres pilares en un ritual para simbolizar la expulsión del mal y el pecado.
Con el objetivo de evitar tragedias, Arabia Saudita impulsó este año el uso de la tecnología avanzada para ofrecer un cambio cualitativo en la organización y gestión del importante evento religioso, como la aplicación de robots inteligentes para guiar a los peregrinos y la instalación de cámaras de reconocimiento facial para mejorar la seguridad o localizar a desaparecidos.