El fenómeno de El Niño llegó a su fin, según la BoM de Australia. Expectativa ante una nueva probable La Niña este 2024
Siete meses después de que comenzara El Niño, las condiciones han vuelto a ser neutrales de acuerdo a lo informado por la Oficina de Meteorología australiana. El actual calor récord de los océanos del mundo abre grandes interrogantes de cara al futuro.
El fenómeno de El Niño llegó a su fin, de acuerdo al comunicado oficial emitido este martes 16 por la Oficina Meteorológica de Australia (BoM).
“El Niño' ya no está activo", indicó el organismo, después de que este fenómeno meteorológico que se produce de forma periódica, pero irregular (con intervalos de entre dos y siete años) se formara a mediados del año pasado, tras un trienio de "La Niña".
La superficie del mar se ha estado enfriando desde diciembre y los indicadores oceánicos y atmosféricos ahora muestran que El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) ha vuelto a la neutralidad, añadió la oficina australiana.
"Los modelos climáticos indican que ENOS probablemente continuará siendo neutral hasta al menos julio de 2024", remarca la BoM, al tiempo que aumentan las probabilidades de que su contraparte más fría, La Niña, regrese en la próxima primavera.
Los factores que decretaron el fin de El Niño
De acuerdo a la reciente actualización del BoM, los indicadores oceánicos y atmosféricos ahora son indicativos de ENSO neutral.
Las temperaturas de la superficie del mar (SST) en el Pacífico central se han ido enfriando constantemente desde diciembre de 2023. Ha habido un enfriamiento sustancial durante la última quincena, con el índice NINO3.4 ahora dentro de los umbrales históricos para la fase neutral de ENOS.
The tropical Pacific Ocean has returned to ENSO neutral conditions.
— Bureau of Meteorology, Australia (@BOM_au) April 17, 2024
Neither El Niño nor La Niña are active.
The long-range forecast is the best guidance for future rainfall and temperature.
Details: https://t.co/wEIHbtvLqg pic.twitter.com/obMTsF4oI3
Este enfriamiento de la superficie está respaldado por una cantidad significativa de enfriamiento de agua subsuperficial en el Pacífico central y oriental, que es típico al final de la fase de El Niño de ENOS. Los patrones recientes de nubes y presión en la superficie, por su parte, son indicativos de variabilidad climática a corto plazo, en lugar de estar influenciados por El Niño.
El calor récord de los océanos llama a moverse con precaución
Los modelos climáticos internacionales sugieren que ENOS probablemente continuará siendo neutral hasta al menos julio de 2024. Si bien tres de siete modelos internacionales predicen que las TSM del Pacífico central alcanzarán los umbrales de La Niña en julio, las predicciones de El Niño y La Niña hechas a mediados de otoño (del hemisferio norte) tienden a tienen menor precisión que las predicciones realizadas en otras épocas del año.
Las temperaturas globales de la superficie del mar (TSM) han sido las más cálidas registradas para cada mes entre abril de 2023 y marzo de 2024. Los datos del mes hasta la fecha para abril de 2024 indican que este mes es más cálido que abril de 2023.
El patrón global de calor está afectando el Patrón global histórico típico de temperaturas de la superficie del mar asociado con la variabilidad de ENOS. Como las condiciones oceánicas globales actuales no se han observado antes, las inferencias sobre cómo podría desarrollarse ENOS en 2024 basadas en eventos pasados pueden no ser confiables.
Una secuencia de Niñas y Niño sin precedentes
Si La Niña se produjera a finales de este año, sería el cuarto episodio de este tipo en los últimos cinco años. Una secuencia de este tipo (tres Niñas seguidas de El Niño, y luego La Niña nuevamente) no se ha registrado anteriormente, dijo Cai Wenju, ex investigador senior de CSIRO, a The Guardian Australia a principios de este año.
Otras agencias también han estado pronosticando la posibilidad de un evento de La Niña a finales de este año. La Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos, por ejemplo, estimó la semana pasada probabilidades de que se produzca La Niña en alrededor del 85 %, aunque sus umbrales son ligeramente más bajos que los de la oficina australiana.