Adiós a las sombras: este proyecto iluminará los rincones más oscuros de la Luna
Los científicos están abriendo camino para aprovechar la energía del Sol en los cráteres más profundos de la Luna. Esta tecnología podría ser clave para establecer la presencia humana sostenible en nuestro satélite natural y más allá.
Explorar –y explotar- los recursos lunares está entre las prioridades de las agencias espaciales. Sucede que, aunque la Luna aún guarda muchos secretos, la humanidad ya tiene varias certezas. Una en especial: en el suelo, los cráteres y los polos de la Luna hay recursos de enorme valor logístico, y por ende, económico.
Los países y sus agencias investigan cómo acceder a recursos como el agua, minerales y volátiles, que podrían ser decisivos para garantizar el abastecimiento de la exploración lunar, pero también para que la Luna sea algún día la base desde la que partir hacia otros planetas.
En esa dirección, un equipo de científicos inició un ambicioso proyecto: diseñar un reflector que permita captar la energía solar y hacerla llegar a lugares recónditos de la luna. En particular, al interior de los cráteres, donde la luz del Sol no llega y donde existen minerales con enorme potencial de uso.
Como ninguna otra, la energía solar está “a mano” en la Luna. Si fuera posible generar energía in situ a partir del Sol, el abastecimiento energético para la exploración lunar sería un problema zanjado.
Los científicos buscarán desarrollar un reflector compacto que se pueda trasladar en las misiones espaciales dentro de las limitaciones de cargas. El proyecto es una asociación entre el Centro de Investigación Langley de la NASA y el Texas A&M University College of Engineering.
“Si colocas un reflector en el borde de un cráter y tienes un colector en el centro del cráter que recibe luz del sol, puedes aprovechar la energía solar", dijo Darren Hartl, profesor asociado de ingeniería aeroespacial en la Universidad Texas A&M. "Entonces, en cierto modo, estás desviando la luz del Sol hacia el cráter".
Los científicos están usando técnicas de modelado para evaluar los posibles diseños del reflector. Según indicaron, los modelos indican que una forma parabólica es óptima para maximizar la cantidad de luz reflejada en el fondo de los cráteres.
“Durante las misiones espaciales, es posible que los astronautas necesiten desplegar un gran reflector parabólico desde un sistema de aterrizaje relativamente pequeño y liviano. Ahí es donde entramos nosotros”, afirmó Hartl. "Estamos estudiando el uso de materiales con memoria de forma que cambiarán la forma del reflector en respuesta a los cambios de temperatura del sistema".
En busca de los tesoros de la Luna
A medida que la exploración espacial avanza, la minería lunar se ha vuelto cada vez más relevante debido al interés en la colonización espacial y la búsqueda de recursos para sostener la vida humana en el espacio. Implica la extracción de minerales y recursos como el helio-3, el agua y los metales presentes en la superficie lunar.
Una de las áreas de interés particular es el cráter Shackleton, de 21 kilómetros de ancho y 4 de profundidad, ubicado en el polo sur de la Luna y llamado así en homenaje al explorador antártico.
Este cráter es particularmente atractivo para la minería debido a su permanente sombra, lo que sugiere la presencia de hielo de agua y otros volátiles atrapados en su interior. El agua lunar será esencial en futuras misiones espaciales, porque puede brindar oxígeno para respirar, agua para beber y usarse como recurso para la producción de combustible.
Las agencias están desarrollando robots y sondas que podrían perforar la superficie lunar, recoger muestras y procesar los recursos para su uso humano o su envío de regreso a la Tierra. Y por supuesto, sistemas de abastecimiento energético que sostengan las operaciones.
Referencia de la noticia:
Shining a Light on Untapped Lunar Resources Comunicado de prensa. T exas A&M University College of Engineering.