Carrera contra el tiempo para evitar la extinción del Ocelote, sólo quedan 100 ejemplares en la Tierra
Este es también el caso del ocelote, un felino salvaje que habita en Centroamérica y para el cual se inició un proyecto de reintroducción de la especie después de que la población se redujera a sólo 100 ejemplares.
Varios animales en el mundo están en riesgo de extinción y la causa, en diversas formas, siempre es el ser humano. Desde la pesca hasta la caza descontrolada, pasando por la apropiación de su hábitat y los accidentes, muchas especies necesitan ser protegidas y, afortunadamente, hay quien piensa en ellas con proyectos de protección y reintroducción.
Este es también el caso del ocelote, un felino salvaje que habita en Centroamérica y para el cual se inició un proyecto de reintroducción de la especie después de que la población se redujera a sólo 100 ejemplares. Es uno de los animales en mayor riesgo de extinción en todo el planeta.
El felino más hermoso de la selva
En silencio, salta sobre el tronco cubierto de musgo de un árbol, pasando junto a flores de color rojo intenso del tamaño de una mano. Esquiva hábilmente ramas y enredaderas y se lanza a través de un arroyo balbuceante. Como una sombra, deambula por la selva tropical, difícil de reconocer en la oscuridad.
Sólo sus ojos amarillos a veces brillan a la luz de la luna, que penetra débilmente el espeso dosel de hojas. El ocelote está realizando una incursión nocturna en la selva amazónica.
Es más pequeño que un jaguar, con un cuerpo ligeramente más delgado, pero en común con este último tiene un pelaje amarillo con manchas negras. El ocelote es un animal nocturno y solitario. Caza en tierra y también en agua: roedores, peces e incluso pequeños caimanes.
Características del ocelote
El ocelote es uno de los más grandes de los llamados pequeños felinos, entre los que también se encuentran el lince y los gatos monteses. Los ocelotes pueblan el continente americano y se encuentran entre el desierto de Sonora en Arizona y los Andes en Argentina.
La mayoría de estos especímenes viven en las selvas tropicales entre Brasil y Bolivia, donde todavía existen grandes porciones de bosque tropical en la actualidad. En la mayoría de los casos estamos hablando de zonas de difícil acceso incluso para los humanos.
Es precisamente dentro de estos densos bosques donde el ocelote encuentra su hábitat natural, donde puede cazar tranquilamente, encontrando una gran variedad de presas.
El proyecto para reintroducir el ocelote está en marcha en Texas
En 1982, los “EE.UU. Fish & Wildlife Service” clasificó al ocelote como una especie en peligro de extinción. En su caso fue la caza y los accidentes automovilísticos los que redujeron tanto su población. Sin embargo, ahora se ha iniciado un proyecto conjunto entre universidades, centros de investigación, agencias gubernamentales y los habitantes, para reintroducir al felino y llevar la población nuevamente a al menos 200 ejemplares para 2033.
Precisamente para ayudar a que estos animales tengan crías sanas y con mayor heterogeneidad genética que la de sus padres, diversas autoridades locales como la estadounidense Fish & Wildlife Service, la Universidad Duquense, el Caesar Kleberg Wildlife Research Institute y la asociación Predator Conservation han comenzado a criar los ejemplares presentes en Texas mediante intercambios entre ranchos y varios zoológicos estadounidenses.
Los ocelotes se encuentran alojados en el Refugio Nacional de Vida Silvestre Laguna Atascosa que, además de tener una mayor cantidad de ejemplares, también cuenta con más espacio, útil para permitir que los ocelotes se reproduzcan y crezcan con un poco de privacidad, sin estar constantemente bajo el lente de investigadores.
El objetivo del proyecto
Según los promotores del proyecto, esta campaña de cría no correrá riesgo por culpa de los ganaderos dado que estos félidos, a diferencia de otros animales, no cazan ganado sino que se limitan a la caza de roedores y aves, incluidas algunas especies que causan algunos daños al campo cultivado por los agricultores.
El objetivo principal de este proyecto, de duración indefinida, es obtener al menos 100 animales adultos más en Texas de aquí a 2030 y redistribuirlos dentro del estado a partir de ese mismo año. Para ello, los biólogos conservacionistas implicados también tendrán que trabajar junto con ecólogos y botánicos para trazar las zonas más adecuadas para esta reintroducción.
El gobierno del estado de Texas ha decidido contribuir a la campaña destinando diversos fondos para el estudio y protección del ocelote y por primera vez en este siglo también piensa en comprar ejemplares de otros refugios y granjas de Estados Unidos, para acelerar las primeras etapas del proyecto.