Estados Unidos está cerca de producir hidrógeno amarillo
Podría ser un invento revolucionario que todo el mundo copiará, como ocurrió con el rojo, que sigue avanzando imparable en Japón.
Estados Unidos acaba de descubrir una fuente tan prometedora que tuvo que darle un nuevo nombre. Los expertos ya hablan del “hidrógeno amarillo”, que no tiene nada que ver con el verde o el azul.
Podría ser un invento revolucionario que el mundo entero copiará, como pasó con el rojo, que sigue avanzando imparable en Japón.
¿Qué es el hidrógeno amarillo?
El hidrógeno amarillo, comúnmente conocido como hidrógeno fotoquímico, se genera mediante una reacción de fotocatálisis de división del agua. El principio básico de este método es limitar el número de reacciones, utilizando la energía solar y catalizadores manipulados para separar las moléculas de agua en hidrógeno y oxígeno.
Esta forma de hidrógeno, llamada hidrógeno amarillo, a diferencia de otras formas convencionales de producción de hidrógeno, no utiliza energía fósil y no tiene un impacto negativo directo en el clima por la emisión de gases de efecto invernadero. Es similar al hidrógeno naranja, pero no depende de las aguas residuales, que es la principal diferencia.
¿Cómo se produce el hidrógeno amarillo?
El proceso de producción de hidrógeno amarillo sigue ciertos pasos. En el primer paso, se utilizan fotocatalizadores semiconductores y luz solar para dividir el agua en hidrógeno y oxígeno, un proceso similar a la electrólisis utilizada para producir hidrógeno verde o azul.
Los fotocatalizadores utilizados en este proceso incluyen materiales semiconductores como dióxido de titanio o sulfuro de cadmio. Estos materiales capturan la luz solar y la aprovechan, permitiendo el proceso de división del agua en la superficie del catalizador.
Las ventajas de este nuevo descubrimiento
El hidrógeno amarillo tiene varias ventajas sobre otras formas de producción de hidrógeno. Es una fuente de energía ecológica que no emite gases de efecto invernadero ni utiliza energía fósil. Según algunas investigaciones, la eficiencia de conversión de energía podría alcanzar el 19 %.
Se puede generar a pequeña escala utilizando materiales simples y baratos, lo que permite una producción descentralizada. Sin embargo, también existen algunos desafíos relacionados con la producción de hidrógeno amarillo.
El proceso aún no se ha refinado y optimizado como otros métodos actuales, y se necesitan más investigaciones y experimentos para mejorar los resultados y la aplicación práctica. Algunos de los fotocatalizadores utilizados pueden ser costosos y su tiempo de funcionamiento suele ser limitado.
Actualmente tiene una tasa de producción más baja que métodos como el reformado con vapor de metano o la electrólisis.
Los nuevos proyectos sobre hidrógeno amarillo
El Laboratorio Nacional de Energías Renovables (NREL) está trabajando en la división del agua mediante fotocatálisis y ha diseñado varios prototipos de sistemas para obtener hidrógeno amarillo. La Universidad de Colorado Boulder está desarrollando un nuevo material fotocatalizador que es más eficiente y económico que los materiales actuales.
La Universidad de California en Berkeley está llevando a cabo investigaciones en el área de la fotosíntesis artificial, con planes de crear hidrógeno amarillo y otras sustancias químicas valiosas. Algunos estados americanos son especialmente adecuados para el desarrollo del hidrógeno amarillo. Un ejemplo es California, la más adecuada para la producción de hidrógeno amarillo, gracias a los recursos solares y a los objetivos de transición hacia fuentes de energía renovables.
Texas tiene grandes oportunidades de crecimiento, ya que el estado ya cuenta con un sector de producción de hidrógeno y energía solar desarrollado bastante avanzado. Arizona y, en particular, Nuevo México, pueden considerarse territorios con alto potencial para el hidrógeno amarillo, gracias a la disponibilidad de terreno y a los altos niveles de irradiación solar.