¿Te has preguntado alguna vez por qué los humanos modernos sustituyeron a los neandertales?
Al contrario de lo que se cree, los neandertales tenían cerebros grandes, lenguaje y herramientas sofisticadas. También hacían arte y joyas. ¿Por qué les han sustituido los humanos modernos?
Es posible que simplemente fuéramos más inteligentes, pero sorprendentemente hay pocas pruebas de que esto sea cierto, porque basándonos en las marcas que nos dejaron los neandertales, podemos decir que también eran inteligentes, lo que sugiere una curiosa posibilidad.
Hace 250 000 años, Europa y Asia occidental eran tierras de neandertales. El Homo sapiens habitaba el sur de África. Las estimaciones varían, pero quizá hace 100 000 años, los humanos modernos emigraron de África.
Lo cierto es que hace 40000 años, los neandertales desaparecieron de Asia y Europa y fueron sustituidos por los humanos modernos. Su lento e inevitable reemplazo sugiere que los humanos tenían alguna ventaja, pero no cuál era.
En el pasado, los antropólogos consideraban a los neandertales unos brutos estúpidos. Sin embargo, recientes descubrimientos arqueológicos demuestran que rivalizaban con el Homo Sapiens en lo que a inteligencia se refiere.
Similitudes entre neandertales y Homo Sapiens
Los neandertales dominaron el fuego antes que nosotros. Eran cazadores mortales, tanto de caza mayor, donde cazaban mamuts y rinocerontes lanudos, como de caza menor, donde cazaban conejos y pájaros. Recolectaban plantas, semillas y mariscos. Es bien sabido que cazar y recolectar todas estas especies requería un profundo conocimiento de la naturaleza.
También tenían sentido de la belleza, por eso hacían abalorios y pinturas rupestres. Eran personas espirituales que enterraban a sus muertos con flores. Los círculos de piedra encontrados en el interior de las cuevas podrían haber sido santuarios neandertales. Al igual que los cazadores-recolectores modernos, la vida de los neandertales probablemente estaba impregnada de superstición y magia, sus cielos estaban llenos de dioses y sus cuevas habitadas por espíritus ancestrales.
Luego está el hecho de que Homo sapiens y neandertales procrearon. En resumen, no éramos tan diferentes. Pero el hecho es que los neandertales, a pesar de haber durado miles de años, desaparecieron y nosotros nos quedamos.
La sociedad de cazadores-recolectores
Dicho esto, es posible que las principales diferencias residan menos en el plano individual que en el social. Es imposible entender a los seres humanos de forma aislada, igual que no se puede entender a una abeja sin tener en cuenta su colmena. Valoramos nuestra individualidad, pero nuestra supervivencia está ligada a grupos sociales más amplios.
Los cazadores-recolectores modernos son la mejor aproximación a cómo vivían los primeros humanos y neandertales. Pueblos como los khoisan de Namibia y los hadzabe de Tanzania reúnen a sus familias en bandas errantes de diez a sesenta personas. Las bandas se unen en una tribu poco organizada de mil personas o más.
Estas tribus no tienen estructuras jerárquicas, sino que están unidas por una lengua y una religión comunes, matrimonios, parentescos y amistades. Las sociedades neandertales pueden haber sido similares, pero con una diferencia crucial: grupos sociales más pequeños. Lo que apunta a este hecho son las pruebas de que los neandertales tenían menos diversidad genética.
Grupos pequeños y poca diversidad genética
En poblaciones pequeñas, los genes se pierden fácilmente. Si una de cada diez personas es portadora del gen del pelo rizado, en un grupo de diez personas una sola muerte podría eliminar el gen de la población. En un grupo de cincuenta, cinco personas serían portadoras del gen: varias copias de seguridad. Así que, con el tiempo, los grupos pequeños tienden a perder variación genética y acaban teniendo menos genes.
En 2022, se recuperó ADN de los huesos y dientes de 11 neandertales hallados en una cueva de los montes Altai, en Siberia. La conclusión fue que varios de estos individuos (que habrían formado parte de un único grupo) estaban emparentados, entre ellos un padre y una hija, y que mostraban una baja diversidad genética.
Como heredamos dos juegos de cromosomas -uno de nuestra madre y otro de nuestro padre-, somos portadores de dos copias de cada gen. A menudo incluso tenemos dos versiones diferentes de un gen. Sin embargo, los neandertales de Altai solían tener una versión de cada gen. Según el estudio, esta baja diversidad sugiere que vivían en grupos pequeños, probablemente con una media de sólo 20 personas.
Es posible que la anatomía neandertal favoreciera los grupos pequeños. Al ser robustos y musculosos (como muestra la imagen superior), los neandertales pesaban más que nosotros. Por tanto, cada neandertal necesitaba más comida, lo que significa que la Tierra podía mantener a menos neandertales que Homo sapiens.
A lo largo de la historia, los humanos han formado grupos sociales cada vez más grandes: bandas, tribus, ciudades, estados-nación, alianzas internacionales. De este modo, podemos decir que la capacidad de construir grandes estructuras sociales ha dado al Homo sapiens una ventaja sobre la naturaleza y otras especies de homínidos.