¿Te has preguntado si vale la pena el esfuerzo de sacar el plástico de los océanos?
El mar está lleno de plásticos y algunas organizaciones tratan de limpiarlo. Pero como los flujos de basura no dejan de aumentar, algunos se preguntan si vale la pena el esfuerzo.
Según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN) al menos 14 millones de toneladas de plástico se depositan en los océanos cada año. Si no se toman medidas, es posible que en 2050 en el mar haya, por peso, más plástico que peces.
En la superficie del océano Pacífico se acumula una extensa isla flotante de plástico que es conocida como "Gran Mancha de Basura del Pacífico". Esa “isla” está compuesta por cepillos de dientes, juguetes, redes de pesca y envases de alimentos.
La organización The Ocean Cleanup cree que puede limpiar la mayor parte de la basura acumulada en esa región arrastrando enormes redes en forma de U y usando barreras flotantes para interceptar la basura.
En los últimos 10 años, The Ocean Cleanup dice haber removido 7.5 millones de toneladas de plástico, y si contara con los fondos necesarios, dicen que podría eliminar el 90 % del plástico.
Críticas para los que limpian el océano
The Ocean Cleanup ha recibido financiamiento de grupos vinculados a la producción de plásticos, y esto ha derivado en críticas por lavar la imagen de empresas contaminantes.
Otras organizaciones europeas como la suiza Oceancare y la británica Agencia de Investigación Ambiental ven las tecnologías de remoción del plástico como una distracción en la lucha por detener el flujo de residuos.
Las organizaciones críticas a The Ocean Cleanup reconocen que el asunto del plástico en el océano y cómo se va a resolver el problema es complejo, sobre todo por la influencia de los productores de plástico en las conversaciones.
Limitar la producción de plásticos es esencial
Activistas e investigadores comparan el problema de la remoción del plástico con las mismas técnicas que usaron las grandes tabacaleras para bloquear la regulación del consumo de cigarrillos.
Bethanie Carney Almroth, profesora de Ecotoxicología en la Universidad de Gotemburgo (Suecia), señala que la evidencia científica muestra que limitar la producción de plásticos es esencial para acabar con la contaminación.
Bolsas "biodegradable"
Una de las cuestiones clave en torno a las bolsas de plástico biodegradables es la confusión que puede surgir del etiquetado. A menudo, estas bolsas se comercializan como "verdes" o "ecológicas", lo que puede llevar a los consumidores a creer que son una opción más sostenible sin comprender completamente sus limitaciones.
Es importante tener en cuenta que el término "biodegradable" por sí solo no garantiza que una bolsa sea completamente segura para el medio ambiente. Para los consumidores, puede ser difícil distinguir entre las bolsas de plástico biodegradables y las bolsas convencionales, lo que hace que la elección sostenible sea más complicada.
Alternativas sostenibles
Las bolsas reutilizables de tela o materiales duraderos son una excelente opción, ya que reducen la necesidad de usar bolsas desechables en primer lugar. También se pueden promover prácticas como llevar tus propias bolsas al hacer compras.