Telescopio James Webb identifica planetas del tamaño de Júpiter misteriosamente emparejados en la Nebulosa de Orión
Se ha realizado un enigmático descubrimiento de proporciones juMBO a través de la lente del Telescopio Espacial James Webb, dejando a los físicos de gases en un dilema.
Si miras las estrellas en una noche despejada entre noviembre y febrero, podrás ver la constelación de Orión, conocida como el cazador en la mitología griega. Lo que también puedes ver es la Nebulosa de Orión, en forma de una leve mancha, que se dice que representa la espada de Orión.
Utilizando el Telescopio Espacial James Webb (JWST), los investigadores han hecho un descubrimiento tentador en forma de 40 pares de planetas del tamaño de Júpiter. Se mueven juntos libremente, sin estar unidos por estrellas, y, francamente, están provocando un enigma a los físicos de gases. ¿Por qué? Porque no es posible que objetos del tamaño de Júpiter se formen por sí solos y, si bien se sabe que los planetas individuales pueden ser expulsados de los sistemas estelares, es inaudito que dos o más planetas lo hagan.
Las dos hipótesis principales
Los planetas del tamaño de Júpiter descubiertos durante el estudio de la Nebulosa de Orión han sido denominados cariñosamente "JuMBO" u objetos binarios de masa de Júpiter —por su traducción desde el inglés—. El origen de estos JuMBO podría explicarse mediante dos hipótesis principales. Una teoría es que se desarrollaron en regiones de nebulosas cuando la densidad del material era inadecuada para producir estrellas a gran escala.
Alternativamente, podrían haberse desarrollado alrededor de estrellas y luego haber sido expulsados al espacio interestelar como resultado de numerosas interacciones. Esta última, denominada "hipótesis de la eyección", se ha convertido por el momento en la explicación preferida entre los científicos. La dificultad radica en comprender por qué pares de estos JuMBO podrían ser expulsados juntos. Este es un tema que requiere mayor investigación teórica.
El equipo del profesor Mark McCaughrean utilizó la excepcional resolución y sensibilidad infrarroja del JWST para llevar a cabo una investigación exhaustiva de la Nebulosa de Orión (comúnmente conocida como M42), la zona de formación estelar más cercana a la Tierra. El Trapecio es un cuarteto de soles ardientes en su centro, que pueden verse a simple vista como una mancha en el cielo.
Estos hallazgos ponen en duda los modelos predominantes de generación de sistemas planetarios, ya que no se predijo que los pares binarios de planetas fueran expulsados juntos. Este descubrimiento ofrece nuevas posibilidades e insinúa que podrían estar presentes objetos comparables en otras áreas de formación estelar, esperando ser descubiertos con telescopios más grandes como el JWST.